La polvareda que levantó el año pasado el reportaje con niñas de diez años en 'Vogue Francia' que posaban como auténticas maniquíes excesivamente pintadas y con tacones altos ha llevado a que el grupo Conde Nast Internacional mueva ficha. Y eso que en su momento ya dimitió la editora de la revista francesa, Carine Roitfeld. Ahora el grupo ha anunciado que ninguna de las ediciones de 'Vogue' contratará a partir de ahora a modelos menores de 16 años o que muestren una imagen excesivamente delgada que pueda inducir a la anorexia. Una manera, dicen, de proteger la infancia y apostar por la imagen sana de las maniquíes, que hasta contarán con comida saludable en las sesiones fotográficas.