La catedrática y directora de la Unidad de Psicología Preventiva de la Universidad Complutense de Madrid, María José Díaz-Aguado, ha explicado este viernes que los adolescentes que tratan el tema de la violencia de género en la escuela tienen menos posibilidades de ser maltratadores o víctimas del maltrato.
Díaz-Aguado ha extraído esta conclusión a partir del estudio que ella misma ha dirigido, 'Igualdad y prevención de la violencia de género en la adolescencia' y que ha presentado este viernes en rueda de prensa dentro del marco de la programación estival de la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) en su sede de La Rábida (Huelva).
El estudio ha puesto de manifiesto que la preocupación por la educación en materia de violencia de género es "una realidad que se va extendiendo". Así, la catedrática ha informado de que "el 41 por ciento de la población adolescente ha recibido información en esta línea, siendo, en el caso de Andalucía, de un 52 por ciento".
"Conocer y saber identificar los inicios de una posible situación de violencia es uno de los pasos más importantes que tenemos que transmitir", ha explicado Díaz-Aguado. Además, ha señalado cómo este estudio ha demostrado científicamente que el principal factor de la condición de riesgo es la "mentalidad machista".
Otro de los puntos del estudio que ha destacado la directora es los altos porcentajes de violencia en edades tempranas, "más de un una de cada cinco chicas ha sufrido un control abusivo por parte de sus parejas", llegando esta agresión a convertirse en física en un 3 por ciento de los casos.
En cuanto a los comienzos de este tipo de estudios, Díaz-Aguado ha señalado el miedo que existía entre los investigadores en provocar odio de género que "impidiera relaciones saludables de pareja".
La catedrática ha concluido agradeciendo la preocupación de las distintas consejerías en este asunto "pues son necesarias para que se asuman respuestas y se estudien medidas".
Cifras reveladoras como las ya mencionadas, dejan ver que este problema sigue presente, sin embargo, se tiene la ventaja de que el 41% de los adolescentes en España han sido orientados en la escuela al respecto de las implicaciones de este tema, cifra que en Andalucía crece al 52%. Ello da lugar una mayor confianza en que se están minimizando los riesgos de convertirse en maltratador o maltratado a futuro.
El 21,7% de las adolescentes ha reconocido haber sido controladas hasta el mínimo detalle por su pareja, y el 3,4% ha afirmado haber sufrido maltrato físico.
“Es más difícil reconocerse como abusador que como víctima”, señala la académica al indicar que, en contraste con la opinión de las chicas, los jóvenes aceptan sólo en un 13,7% el haber intentando controlar a su pareja, y el 2,5% reconoce haberle pegado en alguna ocasión.
Llaman la atención detalles como el que en cierto margen los chicos reconocen más haber presionado a su pareja para tener relaciones sexuales, que lo que afirman las chicas haber vivido este abuso.
“Nadie nace maltratador, por lo tanto, los chicos que han tratado este tema en la escuela tienen menos riesgos de ser abusadores. Igualmente, las chicas tienen menos riesgo de ser maltratadas, y tienen más facilidad para salir de esas relaciones y no repetirlas”, afirma Díaz Aguado.
El énfasis propuesto a raíz de este estudio, es la incorporación de más y mejores planes de prevención de conductas agresivas, desde el ámbito educativo.
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