El Plan Nacional de Inclusión Social reforzará el derecho de todos a la plena integración económica y social, con especial atención a la pobreza infantil

La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, ha participado hoy en la conmemoración del Día Mundial de la Cruz Roja y la Media Luna Roja, celebrada en Málaga. En su intervención en el acto, al que ha acompañado a S. M. la Reina, Mato ha ensalzado la labor de la organización en España, en especial a su red de más de 200.000 voluntarios. Su labor, ha afirmado, "ha resultado fundamental en la lucha contra la exclusión y en el conocimiento de las necesidades de los ciudadanos, permitiendo orientar mejor el destino de los recursos públicos disponibles".

La ministra ha explicado que el Gobierno está acometiendo "las reformas necesarias para mejorar la estabilidad, la credibilidad y la competitividad de la economía española, y sentar las bases para recuperar el acceso al empleo". En este contexto, "somos conscientes de que hoy, más que nunca, el paro, la pobreza y la exclusión social exigen prestar una especial atención a la situación de los más vulnerables, estando cada vez más cerca de las personas".

Para desarrollar esta labor, ha dicho Mato, hay que intensificar la acción pública en la protección de los ciudadanos, pero también "reforzar el compromiso de todos, organizaciones sociales y empresariales incluidas, para conseguirlo".

Entre las iniciativas que está impulsando el Gobierno en este sentido, la ministra ha citado el Plan Integral de Apoyo a la Familia y un Plan Nacional de Inclusión Social, con especial atención a la pobreza infantil. Este último plan, ha señalado, "será un nuevo marco de actuación para instituciones, administraciones públicas y organizaciones sociales, con el que queremos reforzar el derecho de todos a la plena integración social".

En concreto, ha señalado, con este proyecto se avanzará en una estrategia de inclusión activa a través de tres ejes: el acceso al mercado laboral, un sistema de prestaciones que tenga en cuenta las necesidades de las personas y unos servicios básicos dirigidos especialmente hacia los más vulnerables.