Las caricias maternas sanan los efectos del estrés de la gestación en los hijos

Pueden modificar el componente genético afectado durante el embarazo, revela un estudio
TENDENCIAS21.NET-15/11/2012

Una investigación realizada en el Reino Unido ha revelado que las caricias maternas pueden sanar los efectos sobre los hijos del estrés de la madre durante la gestación. Si la madre acaricia a su bebé las primeras semanas de vida, el pequeño mejorará su adaptabilidad fisiológica y se reducirán sus emociones negativas, señala el estudio. 

Los autores de una nueva investigación realizada en el Reino Unido afirman que las madres, al acariciar a sus hijos durante sus primeras semanas tras su nacimiento, podrían modular los efectos del estrés materno durante la gestación, sobre el desarrollo del feto.

El aumento en la incidencia de la depresión materna se relaciona por un lado con una menor adaptabilidad fisiológica y por otro con una mayor cantidad de emociones negativas en los hijos, todo ello debido a una falta de caricias por parte de la madre.

El estudio, publicado recientemente en la revista PLoS ONE, contribuye al conocimiento que se posee sobre esta afección y permitirá diseñar mejores servicios de información para las embarazadas y sus parejas.

Estudios anteriores habían descubierto que el estrés durante el embarazo puede provocar problemas con respecto al comportamiento y las emociones de los niños durante periodos prolongados de tiempo.

Efecto a largo plazo

En este nuevo trabajo, investigadores de la Universidad de Liverpool, de la Universidad de Manchester y del King's College de Londres (Reino Unido) estudiaron a madres y niños que participaron en el Estudio Wirral sobre Salud y Desarrollo Infantil, con el fin de determinar la capacidad de una madre para modificar los efectos del estrés tras el nacimiento.

El estrés durante el embarazo es capaz de reducir la actividad futura de los genes de los hijos dedicados a generar una respuesta ante él.

El estrés prenatal es capaz de activar respuestas positivas o negativas en función del entorno en el que se desarrolle el niño, datos que se han relacionado con el hecho de que algunos niños presentan una mayor susceptibilidad a mostrar más miedo o enfado.

“La emotividad negativa es un componente clave del temperamento infantil que conlleva una inclinación al enfado ante los límites impuestos, como el permanecer sentado en un asiento de coche y al miedo ante situaciones no comunes como cuando se acerca un desconocido”, indicaron los autores.

“Una mayor inclinación al enfado suele asociarse con anomalías de la conducta y con el miedo y los trastornos de ansiedad en etapas posteriores de la infancia”.

La caricia como solución

 Los autores observaron que las relaciones entre los síntomas de la depresión durante el embarazo y las emociones infantiles posteriores de miedo y enfado, así como la respuesta cardiaca ante el estrés a los siete meses, varían en función de la frecuencia con la que la madre hubiese acariciado al bebé en la cabeza, la espalda, las piernas y los brazos durante las primeras semanas de vida. Así pues, se concluye que las caricias podrían modificar la actividad genética.

“En estos momentos, estamos realizando un seguimiento de los niños del estudio Wirral para comprobar si la información relacionada con las caricias de la madre siguen influyendo en posteriores etapas del desarrollo”, afirmó la Dra. Helen Sharp del Instituto de Psicología, Salud y Sociedad de la Universidad de Liverpool.

“De este modo, pretendemos averiguar si es adecuado aconsejar a las madres que han padecido estrés durante el embarazo que acaricien más a sus hijos durante los primeros momentos de su vida”, concluye la investigadora.

Opiniones
No existen opiniones para este elemento.
Calle Arroyo del Olivar, nº 162
28018-Madrid
Teléfono: 91 557 70 71. Fax:
e-Mail: info@mujeresenigualdad.com
Facebook Twitter Flickr Youtube

Esta página está optimizada para navegadores
Chrome, Internet Explorer 9 y Firefox 4.0

Bienvenida/o a la información básica sobre las cookies de la página web responsabilidad de la entidad: Confederación Nacional de Mujeres en Igualdad

Una cookie o galleta informática es un pequeño archivo de información que se guarda en tu ordenador, “smartphone” o tableta cada vez que visitas nuestra página web. Algunas cookies son nuestras y otras pertenecen a empresas externas que prestan servicios para nuestra página web.

Las cookies pueden ser de varios tipos: las cookies técnicas son necesarias para que nuestra página web pueda funcionar, no necesitan de tu autorización y son las únicas que tenemos activadas por defecto.

El resto de cookies sirven para mejorar nuestra página, para personalizarla en base a tus preferencias, o para poder mostrarte publicidad ajustada a tus búsquedas, gustos e intereses personales. Puedes aceptar todas estas cookies pulsando el botón ACEPTA TODO o configurarlas o rechazar su uso clicando en el apartado CONFIGURACIÓN DE COOKIES.

Si quires más información, consulta la “POLITICA COOKIES” de nuestra página web.