El sueldo medio de las mujeres que trabajan en España es menor que el salario promedio que reciben los hombres. Una circunstancia que, por conocida, no deja de sorprender cada vez que aparecen nuevos datos al respecto. Los últimos, relativos al año 2008 y que acaba de hacer públicos el Instituto Nacional de Estadística (INE), aluden a una diferencia de un 22%.
La media de los honorarios de las trabajadoras del país fue, en ese tiempo, de 18.920 euros, mientras la masculina ascendió a 24.203 euros. Dos realidades que conforman una remuneración promedio de 21.883 euros. El INE, a través de su Encuesta Anual de Estructura Salarial asegura que la diferencia se reduce si se consideran situaciones similares respecto a variables como el tipo de contrato, la jornada laboral, la ocupación y la antigüedad, aunque reconoce que la desigualdad de la distribución salarial entre sexos es apreciable.
Además, en 2008, el 8,1% de las mujeres tenía sueldos menores o iguales al Salario Mínimo Interprofesional (SMI), frente al 2,9% de los hombres, una 'grieta' que se acentúa cuando se trata de mensualidades más elevadas: el 20,6% de los varones presentaba unos ingresos cinco veces superiores al SIM, algo de lo que sólo disfrutaba el 12,1% de féminas.
Pero en las diferencias salariales no sólo influye el sexo del empleado. También lo hace, sin ir más lejos, la Comunidad Autónoma en la que reside. En todas, no obstante, el sueldo medio de las mujeres es inferior. Las mayores divergencias de ganancias se producen en Navarra y Aragón, mientras Canarias y Extremadura presentan la menor brecha. Los vascos son los que más cobran y los extremeños aparecen a la cola en este capítulo.
La hostelería, la actividad peor pagada
En hostelería se registran los sueldos anuales más bajos –13.957 euros–, un 36% por debajo de la media. Por el contrario, la actividad mejor pagada es la relacionada con el suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado, con 48.579 euros, un 122% por encima del promedio nacional. Le sigue, como sector con los honorarios más altos, el de finanzas y seguros, con 41.619 euros. Las menores diferencias se observan en educación y, las más acusadas, en las actividades científicas y técnicas.
En cuanto a la procedencia, los nacionales y los trabajadores que pertenecen a la Unión Europea presentan los sueldos más elevados –un media al año de 21.883 y 16.824 euros, respectivamente–, al tiempo que el conjunto de empleados con nacionalidad distinta de la española recibe un salario inferior al medio.
La encuesta del INE también refleja la existencia de una relación creciente entre la edad de los asalariados y el dinero que perciben. Así, los mayores obtienen remuneraciones más elevadas. El salario medio anual para trabajadores de entre 25 y 34 años es fue en 2008 de 19.206 euros, y el destinado a los que superaban los 55 alcanzó los 25.235 euros. Pero, además, las diferencias salariales por sexos son mayores según se incrementa la edad de los trabajadores. Algo que se explica, en buena media, por la mayor cualificación de las mujeres más jóvenes respecto a las de edad más avanzada
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