Las jornadas 'Violencias simbólicas, violencias invisibles' que organizaron el Concello y el Centro de Información ás Mulleres (Cim) de Ribadeo concluyeron ayer con la intervención, entre otros, de la psicóloga especializada en violencia sexista Ianire Estébanez Castaño, que habló sobre los usos que hacen los jóvenes de las redes sociales y de los peligros que suponen, tanto por el riesgo de sufrir acoso sexual como por el control que ejercen las parejas sobre los contenidos publicados.
La psicóloga cree que las redes sociales son un arma de doble filo si no se controla la privacidad, pues tienen la ventaja de que «favorecen la socialización y permiten estar en la inmediatez contando la vida», pero al mismo tiempo existe una exposición a riesgos. «Afectan especialmente a las chicas, que se exponen a acoso sexual por parte de desconocidos o de conocidos de conocidos, pues las redes sociales tienen fórmulas muy fáciles de contactar con alguien o encontrar fotos y amenazar con hacerlas públicas», explica.
Por otro lado, las redes sociales «suponen una forma muy fácil de ser controladas por sus parejas». A su juicio, estos espacios de comunicación «favorecen mucho relaciones de dependencia absoluta, de estar siempre en contacto y, si no es así, se toman como muestra de desconfianza. Hoy en día una prueba de amor es dar la contraseña de la red social», comenta. Lo preocupante de esta situación es que se trata de «comportamientos muy normalizados» que las chicas jóvenes suelen interpretar como «una prueba de que la pareja no puede vivir sin ellas» y no como «de dominio». Estos síntomas son el inicio de relaciones de «control absoluto» que cuando se desarrollan pueden desembocar en violencia de género, advierte.
PROYECCIÓN
Abrió la última jornada Goretti Sanmartín, profesora de filología gallega, que habló del uso del lenguaje sexista, la libertad individual o la discriminación. Por la tarde, el psicólogo clínico Manuel Lopo impartió una charla sobre el impacto de la violencia en la salud de las mujeres, y la última ponencia fue a cargo de Rosa Cobo, profesora de sociología, que departió sobre la desigualdad como forma de violencia. Antes de la clausura se proyectó el corto 'Os tempos cambian, as persoas tamén', galardonada en el III Concurso de Guións Cinematográficos.