10/10/2018
Imagen: blog metooep.com/
Un grupo de trabajadoras del Parlamento Europeo han lanzado un blog de internet en el que explican, sin nombres de víctimas ni perpetradores, algunas historias de acoso sexual en la Eurocámara. El objetivo es romper la “cultura del silencio".
Es la respuesta de este colectivo MeTooEP al "sistema insuficiente de protección a la víctima" y gestión de las denuncias en la institución, según denunciaron el pasado 9 de octubre media docena de asistentes parlamentarios de distintas nacionalidades y grupos políticos en rueda de prensa.
La asesora parlamentaria francesa Jeanne Ponte mostró una pequeña libreta floreada en la que, explicó, empezó a escribir las historias de acoso sexual anónimas que ahora irán subiendo poco a poco al blog. Son testimonios tanto de hombres como de mujeres. En el blog se ofrecerán, además, consejos sobre cómo actuar si se sufre acoso sexual.
Varias de las historias recogidas hacen referencia a cenas a las que becarios o asistentes son invitados en Estrasburgo o a proposiciones fuera de lugar en ascensores y despachos. Veamos dos ejemplos:
"Me dijeron que era demasiado guapa para trabajar en la Eurocámara”
“Un compañero me agredió y tocó en una misión oficial del Parlamento”
"No existe oficialmente ni una denuncia de acoso sexual en el Parlamento Europeo. Obviamente no es que esto sea un oasis sin acoso alejado del resto de la sociedad, es que el sistema no funciona y las víctimas no se sienten protegidas como para denunciar", explicó la asistente española Arantxa Calvera, según recoge la agencia Efe.
Por las circunstancias del entorno laboral del Parlamento, una institución con 7.000 personas trabajando, tres sedes y misiones de semanas enteras fuera de casa "se dan las condiciones para que pueda pasar y se deberían poner en marcha medidas efectivas para que no ocurra y, si ocurrre, las víctimas sientan que pueden denunciar".
En muchos casos, tal y como señalan muchas historias del blog, el acoso es entre eurodiputado y asistente o becario, por lo que existe "una relación de poder" entre víctima y perpetrador, lo que dificulta la denuncia porque "cómo denunciar a quien puede echarte del trabajo".
Tanto Calvera como la asistente parlamentaria española Amelia Martínez Lobo afirmaron que los eurodiputados disfrutan de "impunidad absoluta" y que, a menudo, se disculpan ante determinados comportamientos con argumentos como que "es su cultura" o "es una broma".
Hace apenas unos días, la eurodiputada de Izquierda Unida (IU) Marina Albiol presentó su dimisión como portavoz de la formación en la Eurocámara por "la inacción de la dirección a la hora de hacer frente a varios posibles casos de acoso por parte de otros diputados".
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