Javier Urra, psicólogo, reconoce: «Esta nueva realidad a la que hay que hacer frente es un problema social, porque las agresiones también suceden en los colegios, en la calle, pero, sobre todo, porque esta situación es un mal pronóstico para la violencia de género. Si un chico pega a su madre, qué no hará en su día con su novia o su mujer».
El problema del maltrato de los hijos a los padres salta a la palestra, Cada vez son más los padres que acuden a la Fiscalia de Menores para pedir ayuda: no pueden con sus hijos; hijos que les maltratan a menudo. ¿Qué está pasando? No hay que olvidar la presencia de la violencia en la calle, en la televisión. ¿Por qué está pasando todo esto?
Para Alejandra Vallejo-Nájera, psicóloga y escritora, «la familia no es una democracia. Los menores no pueden ejercer el papel de adultos y los padres tienen que saber poner límites».
Javier Urra explica: «No imponer normas, no mantenerse firmes en los castigos, buscar a una tercera persona para sancionar, son el abono idóneo para el conflicto entre padres e hijos. La tiranía se aprende, y si no hay normas, los pequeños interiorizarán que tienen un esclavo y, de más mayores, serán incapaces de manejar la frustración».
¿Hablamos de educación? Porque de eso se trata: no se sabe, muchos padres no saben educar a sus hijos. Y tampoco es que se sientan apoyados por los centros educativos, que no les enseñan a ser padres, que ofrecen en sus aulas, muchas veces, esa misma tiranía, esa inexistencia de normas, de límites en la conducta.
¿Qué hacer? No soy experto en el tema, tan sólo transcribo las señales de alerta, tan sólo reproduzco opiniones y diagnósticos. Sí afirmo, y con contundencia, que entre otros graves problemas que tiene nuestra sociedad actual, el maltrato de los hijos a los padres es muy grave. Cuando maltratan son niños o adolescentes; mañana serán jóvenes y más tarde adultos. Y lo que no se ha aprendido en el hogar es difícil recuperarlo. ¿Aún estamos a tiempo?
