Nuevo ataque del consejero de Justicia e Interior Emilio de Llera a la juez Mercedes Alaya, que instruye la causa contra los ERE fraudulentos pagados con cargo al Presupuesto autonómico. Tras estrenarse en el cargo poniendo en duda las decisiones tomadas por la magistrada, ayer realizó un comentario que bien podría haber provocado algún que otro comunicado de indignación de colectivos feministas o de su compañera de Gobierno Susana Díaz, consejera de Presidencia e Igualdad . No hubo uno ni otro, sino que fue el propio De Llera el que matizó sus palabras.
Al consejero de Justicia e Interior, que visitó ayer la Audiencia Provincial de Cádiz, le preguntaron sobre el nuevo auto de Alaya, en el que reclama un informe de intervención a la Junta en poder de la defensa del ex consejero de Empleo Antonio Fernández y que el Ejecutivo asegura que ya ha enviado al juzgado de Instrucción 6 de Sevilla. De Llera aseguró que respeta las decisiones judiciales y que «confía» en su labor, para después añadir que es «una mujer muy trabajadora. No sé de donde saca tiempo para estudiar y llevar para adelante no sólo este proceso sino otros más complicados y encima sigue guapa» .
El titular de Justicia de la Junta –administración que tiene transferidas las competencias– tardó varias horas en considerar que sus palabras podrían considerarse denigrantes para la juez, al incluir comentarios sobre su físico cuando se le preguntaba sobre su capacitación profesional. En un comunicado, De Llera lamentó «la posible malinterpretación» a sus declaraciones y afirmó que no quería ofender a Alaya sino todo lo contrario: «Elogiar su esfuerzo y la gran capacidad de trabajo que realiza al frente de su juzgado».
¿Por qué entonces mezcló el poco tiempo del que dispone la instructora y cómo, pese a ello, se mantiene «guapa»? El consejero lo justificó en la amistad que les une «como amigos y compañeros de profesión en el mundo judicial». Señaló que se expresó en unos «términos coloquiales», que sus afirmaciones no tenían «un sentido ofensivo o machista» y que estaban hechas desde el «más profundo afecto y admiración».
En el mismo comunicado, De Llera resalta su «firme compromiso por la igualdad y el respeto más absoluto al trabajo de las mujeres» y argumentó que «la mayoría de su equipo directivo en la Consejería son mujeres».
Entre las palabras y la rectificación, la portavoz del PP-A, Rosario Soto, acusó al ex fiscal de Sevilla de «faltar el respeto a las mujeres» al hablar sobre el aspecto físico de la titular del juzgado de Instrucción 6. Para Soto, «en tiempo récord», el nuevo consejero ha pasado «en el terreno profesional del acoso a la adulación y ninguna de las dos cosas suponen respeto», sentenció.
El estreno en el puesto del titular de Justicia no ha sido tranquilo. En menos de un mes ya ha visto cómo el Foro Judicial Independiente mostró su «honda preocupación» tras «censurar» la labor de Alaya en la instrucción de los ERE, sobre todo, tras su decisión de encarcelar al ex consejero de Empleo Antonio Fernández. Esta asociación le recordó que «un miembro del Poder Ejecutivo andaluz no puede ni debe censurar a un miembro del Poder Judicial, ni oficialmente ni a título particular». De Llera no les ha hecho caso.