Era una revindicación histórica de la mujer rural: que su tesón y entrega a las explotaciones familiares se materializase pudiendo ser cotitulares de las fincas agrarias y ganaderas en Castilla-La Mancha. Fue el anuncio que ayer realizó la presidenta de la Junta, María Dolores de Cospedal, en un acto en que la Asociación de Familias y Mujeres Rurales, Afammer, la nombró Presidenta de Honor de la federación castellanomanchega.
En su discurso, en el que reafirmó su entrega al entorno rural y su compromiso por seguir luchando por la igualdad de oportunidades para acabar con la «invisibilidad» que afecta a las mujeres rurales, la presidenta de Castilla-La Mancha aseguró que «en pocos días» el Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha aprobará la orden que regula el registro de cotitularidad de explotaciones agrícolas y ganaderas en la región.
De esta manera, se pretende aumentar un 30% el número de mujeres cotitulares en la región. Además, las mujeres que formen parte de una explotación compartida, tendrán derecho a una reducción del 30% en las cotizaciones a la Seguridad Social durante cinco años.
Todas las medidas anunciadas ayer iban en la línea de fomentar el desarrollo rural a través del papel crucial que cumplen las mujeres en los pueblos. María Dolores de Cospedal argumentó en su discurso que seguirá propiciando las políticas que acaben definitivamente con la discrimanción entre hombres y mujeres, y seguir apostando por dar más peso a la mujer en un entorno dominado casi siempre por hombres.
Habló de medidas específicas como la de primar la concesión de ayudas destinadas a empresas agroalimentarias para aumentar su volumen, cuando estén lideradas por mujeres. Por otra parte, indicó que para favorecer la incorporación de mujeres a actividades agrarias, se concederá prioridad a la concesión de ayudas a explotaciones que sean de titularidad compartida o que estén regentadas por mujeres.
Además, todas aquellas mujeres que formen parte de una explotación compartida y soliciten derechos de plantación de viñedo con cargo a la reserva nacional, tendrán una bonificación del 25 por ciento en el precio de compra de esos derechos.
Todas las explotaciones de titularidad compartida, indicó la presidenta regional, pasarán a tener carácter de explotaciones prioritarias y, por lo tanto, apuntó, «serán merecedoras de ayudas previstas para este tipo de explotaciones».
Otra de las medidas anunciadas por Cospedal es la obligatoriedad que tendrán los grupos de Desarrollo Rural de la región que gestionan las ayudas Leader, de incluir en sus juntas directivas a asociaciones representantes de mujeres rurales en sus comarcas, para que «sean partícipes en la forma en que se reparten esos fondos», porque según apuntó, la ausencia de puestos directivos se debe a una difícil conciliación de la vida familiar con la laboral.
Por otro lado, la presidenta anunció que los programas de formación cofinanciados por la Consejería de Agricultura darán prioridad a las propuestas presentadas por asociaciones de mujeres que tengan entre sus objetivos la formación o capacitación profesional de las mujeres que vivan en el mundo rural.
De esta manera, y con estas iniciativas, el gobierno de Cospedal se ha marcado como objetivo «que las mujeres y hombres del entorno rural tengan las mismas oportunidades que del entorno urbano», ya que según la presidenta, la mujer rural es «la matriz del entorno rural» y la encargada de «conservar el patrimonio el patrimonio medioambiental y cultural de los pueblos».
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